Con la compra de Carlos Peucelle por 10 mil pesos en 1931, y Bernabé Ferreyra en 1932 por 35 mil pesos, el club revolucionó el mercado de pases de la época, ganándose el apodo de «Millonarios», siendo el único club sudamericano en la historia del fútbol mundial en haber realizado el fichaje más costoso del mundo hasta ese momento. En 1932 formó un gran equipo, y finalizó el torneo igualando la primera posición junto a Independiente, 50 puntos en 34 partidos, ganados 22, empatados 6, perdidos 6, goles a favor 81, goles en contra 43 y Bernabé terminó goleador ese año con 43 goles.